Uno de los detalles más importantes que destacaría cuando me encargan un evento, quizás más importante que la logística del lugar, son las condiciones en las que trabajan cada uno de los proveedores, y no menos importante, que exige el espacio donde se organiza el acontecimiento.
Podemos llevarnos una sorpresa, si no contemplamos todos los detalles, y desde luego ser previsor para no tener sorpresas.
Muchos de los sitios donde he trabajado, se limitan a firmar un contrato del espacio, con las condiciones de contratación en cuanto a los servicios que se han pactado con el cliente, es decir: catering para tantas personas, horarios de montaje y desmontaje, forma de pago, condiciones de limpieza del lugar, entre otros.
Pero señores, yo me pregunto, ¿por qué no te explican y cuentan todo lo relativo a las condiciones de trabajo en el sitio, desde un primer momento?
Un sinfín de por menores que van desglosándote como cuenta gotas, entre el departamento comercial y el de calidad de la empresa, sin tener en cuenta la protección de datos de los proveedores y “donde dije digo, digo, diego”. Sin olvidarnos de que por los departamentos de una misma empresa hablan idiomas diferentes y no tienen una agenda, donde saben que sucede, en cada uno de los espacios.
¡¡¡¡ Hola siglo XXI !!!!!!, bienvenido a las aplicaciones de gestión para tener contemplado y agendado todo.
Dicho todo esto, te recomiendo como organizador/a de eventos que más vale prevenir que curar, que todos los proveedores que trabajen contigo estén al corriente de sus obligaciones con la seguridad social y hacienda, que todo tu personal este dado de alta, e incluso que, dependiendo de las características y envergadura del evento, no dudes en contratar un seguro de responsabilidad civil.
Y siempre todo por escrito y recordando cada una de las cosas y detalles por mail, pues las palabras y los chats de Whatssap se los lleva el viento.